lunes, 17 de agosto de 2015

¡QUÉ PARTIDOS TAN PARTIDOS!



Medellín, 17 de agosto de 2015

¡QUÉ PARTIDOS TAN PARTIDOS!
POR:
GONZALO ÁLVAREZ HENAO, CANDIDATO AL CONCEJO DE MEDELLÍN, NÚMERO 7 EN EL TARJETÓN

Si algo queda claro en esta campaña electoral, es la fragilidad de los partidos políticos que integran la denominada Unidad Nacional, la que se entiende pegada con babas y atada a la burocracia. Todo debido a que son una verdadera montonera anarquizada, sin ideología y sin claros propósitos. En el debate electoral para la Alcaldía de Medellín, se encuentran divididos con dos candidatos: por una parte, Gabriel Jaime Rico Betancur, que al parecer cuenta con el apoyo de Cambio Radical, una parte de la U y otra del Directorio Conservador, porque las otras fracciones, de estas dos corrientes políticas, con sus encopetados miembros y gente de la base, están con Juan Carlos Vélez Uribe.

Por el otro lado, Eugenio Prieto Soto, cuenta con la maquinaria de la Administración de Aníbal Gaviria Correa y con medio partido liberal, pues muchos liberales, empezando por Néstor Hincapié, Rector de la Universidad de Medellín, están con Gabriel Jaime Rico. Lo curioso de todo esto, es que algunos candidatos al Concejo de Medellín, que figuran en la lista liberal, están apoyando en secreto a Gabriel Jaime Rico Betancur. Lo cierto de esto último, es que no dan a conocer sus intenciones para no incurrir en la doble militancia y perder las mieles del poder.

En esta campaña electoral, no hay un debate de ideas, de programas, de propuestas y de soluciones reales a los graves problemas que aquejan a la ciudad, tales como la inseguridad, la drogadicción, el maltrato infantil,  los  niños que están vinculados a los expendios de drogas y a la delincuencia generalizada en todos los niveles. Así como tampoco se tienen fórmulas para atacar la congestión vehicular, el desempleo que se expresa en la enorme cantidad de venteros ambulantes, ni se escuchan propuestas serias para ayudar a las personas que se encuentran en situación de miseria y de calle.

La mayoría de los candidatos, carecen de liderazgo y de independencia para manejar los asuntos de la ciudad en caso de salir elegidos, pues dependen de lo que determinen ciertos caciques políticos y los grupos económicos, tradicionales o emergentes. Gran incidencia tienen en esta campaña electoral, los llamados paramilitares o  bacrím, si es que así los quieren denominar, por el control que ejercen en buena parte del territorio del Municipio, por el afán de lucrarse  del presupuesto y por la vocación que tienen de poder.


¡Campaña electoral como esta, no tiene antecedentes en la ciudad de Medellín!

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